La primera vez la compré en la farmacia. Mis articulaciones no me dolían mucho, pero los problemas comenzaban a hacerse presentes. Hice un tratamiento de un mes y me olvidé de mis problemas. Un día mi marido tuvo una inflamación articular, me dirigí a la farmacia por Flexosamine, pero ya no la vendían. Durante mucho tiempo estuve buscando hasta que encontré su sitio web. ¡Gracias! Ahora mi esposo está mucho mejor.